DIA DE LA SALUD: CIRUJIA BARIATRICA
. 7 DE ABRIL, DÍA MUNDIAL DE LA SALUD
. LA CIRUGÍA BARIÁTRICA, LA MEJOR ARMA CONTRA EL SOBREPESO Y SUS CONSECUENCIAS
OBESIDAD : LA “ NUEVA” ENFERMEDAD SE CONVIERTE EN PANDEMIA
Analizamos los distintos tipos de cirugía bariátrica y su repercusión física y psicológica en el paciente, con los expertos de Clínicas Dorsia
Se le relaciona con 11 tipos de cáncer y está asociada al riesgo de accidentes vasculares, así a otro tipo de enfermedades graves como hipertensión, diabetes o trombosis renal.
El último informe que sitúa el sobrepeso y la obesidad en la zona de alarma sanitaria procede de Francia, Grecia y Reino Unido y bajo el título de “Adiposidad y cáncer en los principales sitios anatómicos: revisión general de la literatura “ cita a los carcinomas de ovario, páncreas, mama, riñón, mieloma múltiple, estómago y recto, entre otros.
Lo que comenzó como el resultado, entre otros factores, de la mala alimentación de los países industrializados se ha convertido ya en enfermedad y se ha extendido por todo el globo terráqueo, incluyendo a las naciones más deprimidas, sin una cultura de la alimentación.
Mientras las autoridades sanitarias libran su particular lucha contra la grasa saturada y el azúcar industrial, las cifras son preocupantes y hablan de prevalencia global del problema. Según cifras de la OMS, más de 1.900 millones de adultos mayores de 18 años presentan sobrepeso, de los cuales más de 600 millones tienen obesidad. En España, con una tendencia del 23% de la población adulta con obesidad y un 38% con sobrepeso, preocupa la prevalencia y la incidencia en la población infantil.
Además de los graves problemas físicos asociados, la obesidad y el sobrepeso, presentes cuando nuestro índice de masa corporal sobrepasa , en el primer caso, los 25 kilos, y en el segundo, los 30, pueden provocar graves problemas psicológicos en quienes la padecen. ( El IMC se halla dividiendo el de una persona en kilos por el cuadrado de su talla en metros (kg/m2).
Según Laura Salcedo, psicóloga de Minerva, la Unidad de Obesidad de Clínicas Dorsia, se da el caso de personas con una gran merma de la autoestima por una mala percepción de su imagen física, y, en un segundo estado, son pacientes víctimas de la ansiedad y la frustración al no encontrar en las dietas la solución a su problema.
La combinación de ambos factores puede llevar a un estado depresivo que les aísla y que incluso les conduce a un mayor aumento de peso, puesto, asegura la experta, no se debe descartar el origen o la contribución de los problemas nerviosos en la obesidad: “Teniendo presente la definición de la obesidad como un estado corporal caracterizado por una acumulación de grasa, debido a un desequilibrio energético los factores que intervienen en ese desequilibrio son la clave del sobrepeso”
En estos casos, cuando existe riesgo físico, así como padecimiento mental y ni las dietas ni el ejercicio se revelan como medidas eficaces, la solución pasa por la cirugía bariátrica . Bajo este epígrafe se engloban las intervenciones que tienen como objetivo reducir el estómago y así su capacidad para almacenar alimentos.
La primera se denomina Método POSE y consiste en la introducción vía oral de mini-instrumentación con el fin de reducir la parte alta y baja del estómago. Las plicaturas que se realizan consiguen que el paciente se sienta saciado antes y con una ración más pequeña, y que tarde más en tener hambre, puesto afectan a la producción la hormona llamada ghrelina. Esta hormona controla e apetito y disminuye el hambre. POSE está indicado para personas con un sobrepeso de entre 15 y 35 kilos. La intervención, de una duración aproximada de 45 minutos, se realiza en quirófano y bajo sedación.
La cirugía de Manga Gástrica recibe su nombre de la forma que adopta el estómago tras realizar la intervención. En ésta se elimina la parte superior, presentado el resultado forma de manga alargada. Este procedimiento, además de reducir el estómago, consigue la disminución de las hormonas ghrelina, logrando que el paciente tenga menos ganas de comer. La Manga Gástrica está indicada para pacientes con obesidad y un IMC entre 35 y 45. También para pacientes con una obesidad más severa, es decir, IMC mayor de 55, como primer paso para un posterior by-pass gástrico.
La cirugía se realiza con anestesia general y mediante laparoscopia. El cirujano realiza de 2 a 5 incisiones en el abdomen del paciente .La duración de la intervención es de entre 60 y 90 minutos, durante las que se reduce el 80% del estómago.
El balón gástrico, más conocido, consiste, en la introducción de este elemento durante seis meses en el estómago, tiempo en el que el paciente perderá peso muy rápido. Después, la reeducación alimentaria del paciente conseguirá que no vuelva a recuperar el peso de nuevo. Esta especialmente indicado para personas que tengan una masa corporal superior a lo recomendado por su altura o peso ideal. Hablamos de un sobrepeso de entre 15 y 45 kilos. Su colocación no requiere anestesia general y se realiza mediante técnica endoscópica, bajo sedación general, en unos 30 minutos.
Por útlimo, el balón ajustable es considerado por los especialistas como el método no invasivo más eficaz y seguro para tratar la obesidad. Consiste en la introducción de una esfera (balón) de silicona en el estómago del paciente, provocando una sensación de saciedad inmediata y prolongada. Tiene una duración de 12 meses, tiempo en el que el paciente ha participado en un plan de reeducación alimentaria para que consiga cambiar sus hábitos y adoptar un estilo de vida saludable. Está indicado para personas mayores de 18 años, con un Índice de Masa Corporal (IMC) superior a 25 y hasta 40.
Sin embargo, a pesar de las diferencias entre unos y otros métodos, explica, Jordi Mir, cirujano plástico de Dorsia, se trata de intervenciones quirúrgicas que no pueden contemplarse como un tratamiento individual, sino como parte fundamental de un proceso global, que contempla un seguimiento completo del paciente. La cirugía bariátrica no abarca no sólo el pre y post operatorio, sino, por supuesto, la posterior re-educación alimentaria ,antes mencionada, y el diseño de un plan de ejercicio personalizado y, por último, pero no menos importante, una propuesta estética si el paciente así lo desea.
Además, añade Laura Salcedo, según de qué operación estemos hablando ( Método Pose, Balón gástrico ,Manga Gástrica o Balón Ajustable) se incluye un seguimiento psicológico que puede alargarse hasta el año, puesto que , como explica la experta: “normalmente, siempre que hay que adaptarse a algún cambio nuevo, surgen periodos de bienestar y autoeficacia percibida, junto con periodos de fracaso y frustración por objetivos o metas no alcanzadas, con lo cual durante todo el tratamiento hay que intervenir en la motivación del paciente y en el apoyo psicológico, de manera continua”
Al final del largo trayecto, los beneficios son incuestionables. Se trata, en definitiva, de una nueva vida, que la psicóloga de Dorsia, resume en los siguientes puntos.
- Mayor adaptación social: mejor integración social y mayor disfrute de las relaciones interpersonales.
- Mejoría/Desaparición de posibles trastornos psicopatológicos secundarios (sintomas ansiosos-depresivos)
- Desarrollo y mantenimiento de hábitos de ejercicio físico. Aprenden a vivir en movimiento.
- Mejora de la percepción de salud: se sienten mejor con su salud, y se produce una disminución drástica del tratamiento farmacológico, por la mayoría de las enfermedades asociadas.
- Percepción positiva de su calidad de vida: con el aumento de su bienestar mental y la mejora del estado de ánimo, están más motivados y con más ganas de vivir.
Aunque la percepción de su físico es muchísimo más positiva, un aspecto que no se suele comentar, explica Jordi Mir, es que en determinados casos los pacientes quedan algo desconcertados con su nuevo aspecto. Se ha perdido mucha masa corporal y queda la piel, que , a falta de músculo, se descuelga, produciendo un efecto visual que a veces disgusta.
En este punto, es cuando , una vez perdidos los kilos, comienzan a solicitarse intervenciones de cirugía estética para reparar este y algún que otro detalle estético. Las zonas más intervenidas en cirugía estética tras una reducción de estómago, son el abdomen y la zona baja de la espalda, la cara interna de los muslos y la de los brazos. Por lo tanto, se solicitan abdominoplastias, lifting de brazos y muslos, y tratamientos de cirugía de contorno corporal destinados a la reducción de los excesos sobrantes de piel, y a recuperar el tono y elasticidad de la misma.
Laura Salcedo es psicóloga en Minerva, la Unidad de Sobrepeso y Obesidad de Clínicas Dorsia.
Jordi Mir es cirujano plástico en Clínicas Dorsia.
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